Pregunta terrorífica

Fecha:18 de octubre de 2006

Distancia (kms): 10.55

Paso: 5'42"/km

FCP (Puls/min): 159

Ruta: Camino a Tinajas

Clima: Despejado, fresco

Divagaciones:

Tocaba carrera rápida y eso intenté, arranque rápido y traté de mantener el paso, solo en la subida de la calle cananea, de ida y de regreso, bajé la velocidad. La verdad es que esa está empinada, pero siempre hay que incluir al menos una colina. Yo pensé que iba a mejorar mi tiempo de la semana pasada, pero fue exactamente el mismo, puede ser que las obras en la Luis Encinas me detuvieron un poco, o simplemente corrí igaul aunque me haya sentido mejor hoy.
A pesar de que estaba fresca la mañana de todas maneras me aventé un clavado a la alberca. Cuando arranque la carrera, y sentí el aire, pensé en mejor dejar el chapuzón, pero al llegar no pude contener las ganas. Así que al llegar agarré un agua mineral, bajé a quitarle la cubierta térmica a la alberca, que desde el domingo que comencé a ponerle para que no se enfrié mucho en las noches, y me eché un clavado. Voltee a ver un pajaro carpintero que golpeaba una pared y en el momento que me preguntaba si sería eso suficiente para despertar a Rebeca miré hacia la ventana del cuarto, ahí estaba ella, ya despierta.
Entré a la casa le serví su café, platicamos un rato mientras me preparaba mi licuado de frutas. Subió ella al cuarto a cambiarse para ir a su "spinning", aún no acababa de cambiarse cuando la alcancé. Me senté en la cama mientras veía el noticiero y acababa de tomar mi café. Ella se paró frente al espejo, contemplándose y en eso me hizo la pregunta más terrorifica que una esposa le puede hacer a un esposo.

"M'hijito, ¿Tú crees que estoy gorda?"

No importa lo que uno conteste, es una trampa sin salida...