El domingo pasado en un impulso de locura nos lanzamos al norte. Primera parada Nogales, a ver a los Tirado-Torrero, en especial a mi ahijado Mayo.
Mayo con Cloty y Rebeca |
Posteriormente saltamos al otro lado, podría decir que a que Rebeca y mi suegra preferida, Cloty, hicieran compras, pero yo también tenía mi lista. En especial unos tenis minimalistas, ahora que estado leyendo con más calma sobre "barefoot running". Así que me compré unos Nike "free", aprovechando una gran barata en el outlet. para mi fortuna encontré un buen rompevientos para Rebeca, que tenía rato con ganas de uno (usando uno mío, mientras lo encontraba).
El resto de la jornada fue estar siguiendo a mi mujer, que la mayor parte lo que hacía era buscar a Cloty que continuamente se le perdía.
Al final del día acabamos de regreso en Nogales, yo en piloto automático, con ganas de dormir, cosa que hice, después de unas buenas quesadillas que nos preparó Armando.
Ya de regreso en Guaymas, pues un poco desesperado, comenzó el megapuente Lupe-Reyes, así que de aquí al 7 d enero es difícil que algo ocurra, ni modo, así son las cosas.
En una corrida de 10 kms estrené mis tenis minimalistas, ¿el resultado?
Sentimientos encontrados, cómodos, pero me sentí raro, lo que es lógico, tantos años corriendo con tenis con refuerzos, alcochonamiento y diseños para una forma de correr no es fácil cambiarlos de "golpe y porrazo".
Así que hoy, sábado, la carrera larga preferí hacerla con mis viejos Asics, mejor me voy adaptando poco a poco.
Ya les contaré como me voy adaptando a los nuevos zapatos.
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