sábado, abril 25, 2015

Autogol

Estaba muy tranquilo viendo el fútbol, Monterrey vs Morelia, cuando me llegó un chiste por whatsapp. Lo estaba leyendo cuando paso Rebeca frente a mi.
"M'HIJTA",  le digo llamando su atención. "Va un chiste, se para una mujer frente a su marido y le pregunta que  como se vé. El señor le dice que está como el dólar. La esposa le responde preguntando que si tan bien la ve. El marido le dice que no, pero que sin duda le vale madre el peso"...
Rebeca detuvo el paso, me miró fijamente a los ojos (temblé) y poniendo los brazos  a los lados, apoyando los puños en las caderas, me preguntó: "¡¿POR QUE ME CUENTAS ESE CHISTE?! ".
Inmediatamente me di cuenta de que había cometido un gran autogol, no hay salida posible.

domingo, abril 12, 2015

El Cardenal

Toda la semana, desde el lunes, me había contemplado el sábado tumbado junto a la alberca. Fue una semana muy movida, incluyendo un viaje a Guadalajara. Hoy, sábado, temprano aspiré la alberca, subí, desayuné, me bañé, fui por cervezas, regresé, me pasé traje de baño, saqué mi lectura, mi cerveza, me senté y...
Comenzó a llover.
Me senté frente a la tele, había comenzado el juego Cruz Azul vs Tigres...
Cuando terminó el primer tiempo había parado la lluvia.
En eso escuché un Cardenal, abrí la puerta de la terraza y salí; pero hice mucho ruido, la Pola saltó y me hizo fiestas. Así que nada de Cardenal, pero me encontré un par de palomas posando en un pilar, con el mar de fondo, los cerros y el cielo nublado. No llegaba a compensar mi expectativa de la vista del Cardenal.
Me di la vuelta y me encontré que en la barra de la casa estaba parado el Cardenal. Me acerqué lo contemplé un poco. Saqué mi celular y voló. Con ese vuelo tan peculiar, perdiendo un poco de altura al principio. Se posó en el palo verde que está pegado a la barda. Se dejó contemplar, luciendo sus colores y presumiendo su canto.  Bastó que levantara de nuevo el celular para que volara de nuevo.
Se posó en otro palo verde, ya pegado a la calle y volvió a cantar.
"No cabe la duda de que todos los días hay milagros, pero siempre estamos distraídos para darnos cuenta", pensé.