Por consejo de mi mujer cambié mis días de corridas, para dejar el fin de semana libre.
Yo siempre le hago caso a Rebeca, primero porque generalmente sus sugerencias son muy buenas y, segundo y más importante, porque así me anda yendo si no le hago caso.
Como sea, ya van dos semanas que no corro los sábados y puedo decir que Rebeca tuvo razón, los fines de semana son para descanzar.
En esta semana corrí martes (10.8 kms) y miércoles (10.6 kms), para dejar el viernes para la carrera larga. La idea es que está fuera de 15.8 kms, con esa meta me fui a dormir el jueves.
El viernes me levanté y me encontré que la casa estaba cubierta por neblina. Pensé que correría entre nubes, pero para cuando salí el banco de nuebes se veía ya a la distancia.
Por desgracia las nubes dejaron humedad, que con el sol, a pesar de que salí antes de las 6:00 am, hicieron que la corrida fuera bastante pesada. Así que cambié de planes, llegué hasta la parte más alta de la colina de Tinajas, solo para poder ver al Tetas de Cabra y al León dormido, e inicié el camino de regreso.
Fue buena desición, disfrute la corrida. Además más vale que me vaya haciendo a la idea de que me vaya con cuidado, porque ya llegó el calor.
domingo, junio 10, 2012
Ahora si llegó el calor.
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